Dios te bendiga mi amado hermano…
He querido comparti con todos alguna experiencia que he tenido, gracias a Dios, evangelizando a jovenes de todo tipo. Espero esto os ayude a avanzar en este camino y a perseverar en el llamamiento que Dios nos ha hecho.
En el proceso de evangelización, nos vamos a topar con toda clase de gentes, Sabios, estudiados, elocuentes, satanistas, cristianos, solitarios, deprimidos, universitarios, drogadictos, etc., etc.
El punto es saber como vamos a abordar a cada uno en particular.
Nosotros como Jóvenes, tenemos en cierta forma la facilidad de acercarnos a otros jóvenes y predicarles de Cristo. Esta facilidad de acercamiento se ha visto mal entendida por los líderes actuales y se ha olvidado el principio y razón de ser de la Evangelización, el cual es: que se conviertan ellos a ti, y no tú a ellos.
En la iglesia moderna el mundo y la burla han entrado con el supuesto fin de agradar y conquistar la Juventud del mundo, pero en realidad lo que consiguen es una euforia momentánea, una emoción de estos jóvenes que llegan en busca de algo nuevo y diferente, pero al final se cansan por que no encuentran la Vida de Dios.
Hermanos, en especial los Jóvenes (aunque esto es válido para todas las edades), quiero compartirles algo, una experiencia que Dios me permitió tener con Jóvenes en el proceso de Evangelización hace algunos años.
Me bauticé en la iglesia local en el año 2000, inmediatamente, el deseo de alcanzar a otros jóvenes para Cristo comenzó a crecer más y más en mi corazón y pude darme cuenta de la gran necesidad de la juventud de hoy día, primero por que yo personalmente estaba necesitado de Dios y era grande la necesidad. Pude darme cuenta que esa misma necesidad la tenían todos los hombres en esta tierra.
Habíamos 4 jóvenes en la Iglesia, los 3 primeros eran los Líderes y llevaban casi 13 años en la Congregación y yo tenía solo 2 meses de estar con ellos. Dios colocó en los 4 el deseo de alcanzar a los demás jóvenes del Barrio para Cristo, y comenzamos a Buscar el rostro del Señor en Oración y Vigilia.
Recuerdo que ellos iban por mi todos los Días a las 3 de la mañana para orar por los Jóvenes. Salíamos por todas las calles del barrio orando, clamando a Dios por la juventud, y dondequiera que vivía un joven, orábamos en el frente de la casa, casa por casa, joven por joven. Dios comenzó a revelarse de una manera especial en esos devocionales, y todos experimentamos la compañía tangible del Señor, no había duda que El Señor estaba con Nosotros.
Un mes después, había una asistencia de 60 jóvenes en la Iglesia, y seguíamos orando y buscando más el rostro del Señor. Un mes mas tarde había en total 130 jóvenes congregándose y con el deseo de ser cambiados por el poder de Dios.
Continua...
He querido comparti con todos alguna experiencia que he tenido, gracias a Dios, evangelizando a jovenes de todo tipo. Espero esto os ayude a avanzar en este camino y a perseverar en el llamamiento que Dios nos ha hecho.
En el proceso de evangelización, nos vamos a topar con toda clase de gentes, Sabios, estudiados, elocuentes, satanistas, cristianos, solitarios, deprimidos, universitarios, drogadictos, etc., etc.
El punto es saber como vamos a abordar a cada uno en particular.
Nosotros como Jóvenes, tenemos en cierta forma la facilidad de acercarnos a otros jóvenes y predicarles de Cristo. Esta facilidad de acercamiento se ha visto mal entendida por los líderes actuales y se ha olvidado el principio y razón de ser de la Evangelización, el cual es: que se conviertan ellos a ti, y no tú a ellos.
En la iglesia moderna el mundo y la burla han entrado con el supuesto fin de agradar y conquistar la Juventud del mundo, pero en realidad lo que consiguen es una euforia momentánea, una emoción de estos jóvenes que llegan en busca de algo nuevo y diferente, pero al final se cansan por que no encuentran la Vida de Dios.
Hermanos, en especial los Jóvenes (aunque esto es válido para todas las edades), quiero compartirles algo, una experiencia que Dios me permitió tener con Jóvenes en el proceso de Evangelización hace algunos años.
Me bauticé en la iglesia local en el año 2000, inmediatamente, el deseo de alcanzar a otros jóvenes para Cristo comenzó a crecer más y más en mi corazón y pude darme cuenta de la gran necesidad de la juventud de hoy día, primero por que yo personalmente estaba necesitado de Dios y era grande la necesidad. Pude darme cuenta que esa misma necesidad la tenían todos los hombres en esta tierra.
Habíamos 4 jóvenes en la Iglesia, los 3 primeros eran los Líderes y llevaban casi 13 años en la Congregación y yo tenía solo 2 meses de estar con ellos. Dios colocó en los 4 el deseo de alcanzar a los demás jóvenes del Barrio para Cristo, y comenzamos a Buscar el rostro del Señor en Oración y Vigilia.
Recuerdo que ellos iban por mi todos los Días a las 3 de la mañana para orar por los Jóvenes. Salíamos por todas las calles del barrio orando, clamando a Dios por la juventud, y dondequiera que vivía un joven, orábamos en el frente de la casa, casa por casa, joven por joven. Dios comenzó a revelarse de una manera especial en esos devocionales, y todos experimentamos la compañía tangible del Señor, no había duda que El Señor estaba con Nosotros.
Un mes después, había una asistencia de 60 jóvenes en la Iglesia, y seguíamos orando y buscando más el rostro del Señor. Un mes mas tarde había en total 130 jóvenes congregándose y con el deseo de ser cambiados por el poder de Dios.
Continua...
Vie Jun 05, 2009 10:51 am por residencias
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